En Tucumán, los productores rurales de citrus están preocupados por los recurrentes robos. Según denuncian, los delincuentes les sustraen lotes completos de limones y luego comercializan los frutos a través de una suerte de "mercado negro". Ayer, las autoridades dieron un paso clave para identificar y procesar a un grupo de personas que forma parte de esta operatoria.
Efectivos de la comisaría de El Timbó, departamento Burruyacu, llevaron adelante durante la tarde un allanamiento en una finca ubicada en esa localidad, a la vera de la ruta 308.
Con el apoyo de agentes de Infantería de la Unidad Regional Este (URE), los uniformados ingresaron a la propiedad y secuestraron armas y 50 bolsas de arpillera con limones que habían sido sustraídos cinco días atrás a unos productores de la zona.
Los investigadores determinaron que los dueños de la finca compraban citrus robado a otros productores, y no se descarta que puedan formar parte de la red ilegal.
El jefe de la URE, Fabio Ferreyra, explicó que en el operativo los agentes encontraron tres armas de fuego y municiones. "Una fue entregada a su dueña por orden de la Justicia ya que contaba con la documentación. Lo más importante era encontrar esta gran cantidad de limones que le habían robado a unos productores de la zona, que habían denunciado el hecho hace unos días. El personal trabajó y determinó que estos acusado compraban a menor costo la fruta robada”, señaló el comisario.
Según el informe oficial, la Unidad Fiscal de Decisión Temprana del Ministerio Público Fiscal no dispuso medidas privativas de libertad contra los propietarios de la finca, aunque las armas y las demás evidencias quedaron secuestradas en el marco de este expediente.
En el Ministerio de Seguridad indicaron en el reporte del caso que existe "un compromiso con los productores rurales" para contrarrestar a los delincuentes "que roban los cítricos para comercializarlos a otros productores y en la vía pública a bajo costo.